Los conductos subterráneos son sistemas de tuberías que se utilizan para proteger y enrutar cables, conductos y cables eléctricos bajo tierra. Pueden estar hechos de una variedad de materiales, como acero, hormigón, fibra de vidrio y plástico. La elección del material a menudo depende de factores como el entorno en el que se instalará el conducto, el tipo de cableado que albergará y la vida útil esperada de la instalación.

Conducto de PVC subterráneo:

Los conductos de PVC son especialmente populares para aplicaciones subterráneas porque ofrecen varias ventajas:

• Resistencia a la corrosión: a diferencia de los conductos de metal, el PVC no se corroe cuando se expone a la humedad, productos químicos o condiciones del suelo que podrían causar oxidación o degradación.
• Ligero: el PVC es mucho más liviano que el metal, lo que lo hace más fácil de manipular e instalar, especialmente en largas distancias.
• Rentable: Los conductos de PVC generalmente son menos costosos que los conductos de metal y pueden reducir el costo general de un proyecto de instalación eléctrica.
• Instalación flexible: Los conductos de PVC se pueden doblar y dar forma sin herramientas especiales, lo que permite un enrutamiento más fácil alrededor de obstáculos.
• Durabilidad: Aunque son livianos, los conductos de PVC son duraderos y pueden soportar las presiones ejercidas por el suelo y otros materiales colocados sobre ellos.